En el marco de la exposición ¡Ahí va el golpe! Historias de la Merced que se exhibe en las rejas de la Catedral, presentamos este libro que incluye una serie de historias de uno de los barrios más antiguos de la Ciudad de México, la Merced, contadas por sus protagonistas. Al barrio se le conoce con ese nombre a partir de que en 1594, en él se estableció el convento de “Nuestra Señora de la Merced de la Redención de los Cautivos”. Desde sus orígenes, la Merced ha tenido un carácter predominantemente comercial, desde el que han surgido múltiples historias y leyendas.

Participantes:

Susana Casarín, Obtuvo el premio de Fomento y Coinversión de Proyectos culturales del FONCA, en 1999. Ganó el XXVII Premio Nacional de Artes Gráficas por la edición del libro Pedro Diego Alvarado Rivera, en 2007. Y con el libro Autorretratos obtuvo una Mención en la Segunda Feria Internacional de Libros de Artista en 2011. Ha participado en más de 29 exposiciones individuales en el país, así como en 48 exposiciones colectivas en distintas ciudades de México, Alemania, China, España, Estados Unidos, Francia, Guatemala e India. Su obra forma parte de la colección fotográfica del Banco de México. Desde el 2005 a la fecha trabaja como editora de libros de fotografía. Actualmente participa como editora de la fotografía de la colección de libros Zonas de Monumentos Históricos, editados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.

Norma Yolanda Contla Piña. Maestra de danza clásica y contemporánea, se dedica, desde hace varios años, a la investigación de tradiciones y cultura popular.  Ha desempeñado diversos cargos relacionados siempre con la promoción y difusión cultural. Escritora de cuentos, pastorelas y breves obras costumbristas; publicó La Fiesta Juventud y Cultura en Veracruz I y II, Xantolo en Tempoal, entre otros. Su inquietud personal la ha motivado para acercarse directamente a los lugares, platicar con la gente del pueblo, guardianes de la tradición, pues ella prefiere sentir el olor y la textura de las flores, escuchar, ver y saborear las ofrendas, inspiradas por el color  y el gusto en todos sus sentidos.