A partir de la idea original de la doctora Glinda Irazoque, el actor y dramaturgo Hector Ortega escribió un divertido y entrañable texto dónde un niño no quiere ir a la escuela pues se siente profundamente aburrido, piensa que los conocimientos no son necesarios. El niño, llamado Eugenio, recibe la visita de un genio quien le muestra lo cotidiana que es su relación con las ciencias, particularmente con la química. Con la ayuda de sorprendentes experimentos que parecen magia pero son realmente reacciones químicas, el niño, maravillado recuperará el interés por aprender, por saciar su curiosidad y así volver a la escuela. En medio de divertidas situaciones, el niño conocerá algunos elementos de la tabla periódica. Se muestran en escena varios experimentos, como un volcán en erupción, una pasta de dientes para elefantes, el hilo nylon, la reacción oscilante, o un reloj químico.

Presenta: Cientifik Teatro