Jaime e Irene son los padres de Miguel, un niño de diez años que es acosado por sus compañeros de escuela por llevar una mochila de My little pony. El director de la escuela considera que la mochila es la causa del bullying y la solución: prohibirle a Miguel la entrada al colegio con su mochila.

La pareja se enfrenta a cómo lidiar con la situación, frenar el maltrato y sufrimiento que padece su hijo. Si bien ambos padres quieren proteger a Miguel, cada uno tiene su propio punto de vista sobre lo que es “mejor” para el niño. El padre defiende las decisiones de su hijo y la madre cree que lo mejor para Miguel es no llamar la atención y tratar que encaje en la norma. Mientras, ninguno de los dos adultos es capaz de romper el silencio de Miguel.

En la obra, Paco Bezerra reflexiona sobre la empatía, el respeto y la importancia de tratar a cada uno como un ser único con diferentes cualidades, sensibilidades y necesidades. Un debate fundamental que nos interpela sobre la sociedad y los valores que los adultos construimos para el futuro.