Los amigos de la revista Mondo Sonoro vinieron a cubrir el concierto del martes 19 de marzo  de Love of lesbian, Super Submarina y Corizonas en el CCEmx y esta es la reseña de la resportera Erika Athié

Es 19 de marzo, una noche calurosa en la Ciudad de México que anuncia la primavera, y el centro de la ciudad se llena de España con Love of Lesbian  muy bien acompañados por  Supersubmarina y Corizonas. Bandas que traen a nuestro país un pedacito del pop y el rock contemporáneo que se factura al otro lado del charco y todo gracias a la iniciatuva del Centro Cultural de España en México y Elportaldemusica.es.
Fuera una larga fila de amantes de la música dobla la esquina y piden que los dejen pasar que la entrada es libre, pero el foro está lleno y ansioso de que salgan los lesbianos a llenar el lugar de sus delirantes sonidos.
Con una proyección sencilla de un amplificador donde se pueden leer los nombres de las bandas participantes, los tan esperados barceloneses abrieron «La noche eterna» subiendo aun más la temperatura de la sala, combinando éxitos del pasado con sus más recientes sonidos.Ya nadie quedaba por las calles del Zócalo de México, porque todos bailaban al ritmo de los autores de» Club de Fans de John Boy» y no faltaban los fans con las playeras del club. Todos brincaban con los primeros acordes de cada canción y los seis lesbianos se tuvieron que despedir no sin antes lanzar una pregunta al público “¿Si regresamos, vendrán a vernos?” respondiendo de inmediato la audiencia al unísono con un “Sí” y la famosa “Otra, otra, otra”, sin embargo Santi hizo una seña de despedida con la promesa de regresar a tierras mexicanas.
Minutos después Supersubmarina salieron a hacer de las suyas y, pese a ser la primera vez que pisaban el DF, su actuación resultó todo un éxito. Un foro no a tope pero deleitando a los presentes con canciones como «En mis venas», «Para dormir cuando no estés» o «Hogueras».
Para finalizar por todo lo alto los madrileños Corizonas, una excelente banda, fueron los encargados de cerrar el concierto incorporando contrabajo y trompeta a ese toque sureño de norteaméricas. Un cierre perfecto con el que nos regresamos a nuestras casas con una buena dosis de España en las venas