Procesos en diálogo es un proyecto internacional de artes escénicas interesado en los lenguajes transdisciplinarios. Funciona como un lugar donde compartir proyectos escénicos en desarrollo, con la intención de dar a artistas, grupos o colectivos, un lugar donde abrir su proceso creativo en presencia de un público y de ese modo enriquecer su trabajo.

Las/os artistas y grupos seleccionados participan en un programa constituido por dos días de muestra de obra en proceso, diálogos de retroalimentación, acompañados por invitados especiales, y un laboratorio de práctica y reflexión escénica.

La actividad se desarrolla en dos partes: Laboratorio de práctica y reflexión escénica y muestra de proyectos.

• Laboratorio de práctica y reflexión escénica.  Actividad exclusiva para los artistas seleccionados por convocatoria. Se propone como un espacio para la reflexión, la contextualización y el cuestionamiento sobre la producción cultural actual a partir del quehacer escénico. Plantea y evidencia diferentes lecturas de la escena contemporánea con el fin de generar un diálogo entre los asistentes y los dispositivos de creación e interpretación escénicos propios. Tomando como punto de partida los procesos de creación de los participantes, se expondrán distintas aproximaciones en torno al quehacer escénico enfocándonos en la noción de proceso como elemento clave en el desarrollo de nuevas ideas y estrategias de creación.

El objetivo del laboratorio es fomentar el intercambio y la colaboración entre los artistas o grupos participantes dentro de una perspectiva contemporánea de creación y experimentación escénica. Buscando ser un punto de encuentro para incentivar la generación de una comunidad en diálogo y relación mutua.

Imparte:  La Mecedora, plataforma nómada de artes vivas que se mueve entre diversos espacios de pensamiento y experimentación artística para enfatizar el desarrollo de nuevas ideas en torno al arte escénico incentivando procesos artísticos compartidos.

Se propone como una plataforma de muestra, creación y reflexión enfocada en la noción de proceso como elemento clave para el desarrollo de obras, ideas y lenguajes escénicos contemporáneos y transdisciplinarios.

• Muestra de proyectos escénicos en proceso. Presentación pública abierta al diálogo e intercambio entre los artistas y el público asistente. Se presentarán  6 obras o proyectos de diversas disciplinas (danza, teatro, música, teatro-físico…) que se encuentren en proceso y que trabajan a partir del estudio del cuerpo, evidenciando distintas aproximaciones y formatos hacia su representación escénica.

Fechas y horarios:

Laboratorio para seleccionados por convocatoria: Del lunes 2 al viernes 6 de septiembre 2019, 11 – 15 h

Muestra pública de proyectos escénicos en proceso: Miércoles 4 y jueves 5 de septiembre 2019, 19 h

Programa:

Miércoles 4

• Lágrimas del mar de Irene Martínez Ríos // 18 min.

Fragmento de La molécula del agua. Unipersonal en proceso.

El mar tan inmenso ¿llora? Las lágrimas de mar se desplazan lentamente, pero con la acción de las corrientes y el viento, surcan los océanos y tienen una gran capacidad de adaptación. Con Lágrimas de mar indago y divago en torno al paso del tiempo, sus huellas en la piel y en las articulaciones. El desencanto y el júbilo. Los riesgos y los retos.  La libertad insospechada. Y esa única verdadera compañera a lo largo de la vida: la soledad.

Concepto e interpretación: Irene Martínez Ríos

Colaboración: Iyantú Fonseca, Ujaní Fonseca y Norma Olivera.

• Intus de Agustina Ciccola (Arg) y Fermín Martínez* (Mx) // 20 min.

Trabajo de improvisación en escena basado en prácticas construidas sobre lo íntimo, una investigación sobre las posibilidades de construcción de un espacio como posibilidad de refugio. Lo íntimo en tanto esfera de libertad, de desprejuicio, de florecimiento de toda singularidad. Aquel lugar donde compartirse desde lo vulnerable. 

Surge desde la necesidad de repensar los vínculos; hacer desde la experiencia una amplificación para habitar un estado de intimidad. Se trata de percibirse, de expandir la complicidad y dar lugar a la sensualidad del detalle. Así aparece un espacio de permisión para experimentar otras maneras de entrar en el otro, de atravesarnos. Recurrir a la empatía para dejarse acariciar por lo sutil, lo cercano.

Buscar la tensión como estrategia para dar lugar al diálogo entre el choque, la confrontación y el deseo. Expandir y evidenciar aquello que parece dado. Ensanchar lo que se encuentra contenido. Una práctica de apertura hacia nuevos diálogos ligados a leer la potencia del suceso vivo y la singularidad que se despliega en cada nuevo encuentro.
 Un arrojo para volver a conectar con aquello que nos pulsa.

¿Cómo hacer de la intimidad una práctica?

• Dinámicas blandas de Julia Barrios de la Mora* // 15 min.

Indaga marcos coreográficos para potencializar el encuentro performático entre cuerpos humanos y no humanos.

El proyecto parte de cuestionar el pensamiento antropocéntrico que constituye nuestra sociedad actual separando lo humano de lo inhumano, jerarquizando la cultura sobre la naturaleza, lo vivo de lo no vivo.

Se busca una apertura a través del pensamiento y acción coreográfica para habitar(nos) desde la blandes: desde lo desestructurado maleable, afectable, vulnerable, someternos a los sistemas de afectación de un contexto sin pretender a priori una situación de poder. Es un acto político para sentir, esperar, percibir, dar lugar a que lo no humano performé.

¿Hasta qué punto se puede uno de-condicionar para poder percibir, accionar desde otras posibles relaciones? ¿Cómo la coreografía puede abrir paso a diferentes formas de accionar el cuerpo y la mirada para dar lugar a otros cuerpos no humanos?

Jueves 5

•  Mr. Arigato, Mrs. Gozaimasu de Guillermo Aguilar* // 20 min.

Dos japoneses se encuentran en un espacio que es ninguna parte y que podría ser cualquiera.  Colocados en el vacío, evocan a través del gesto corporal el ejercicio contemplativo de la repetición.   Sus cuerpos conversan y convergen en un diálogo absurdo, su movimiento es robótico, perfecto pero visceral y sarcástico (imaginemos por un momento  que estas características son endémicas de la inteligencia artificial).  Ambos, Arigato y Gozaimasu, en sincronía exacta y precisa, moldean narrativas no lineales y reflejan la necedad futurista, -aquella del futuro que nos alcanzó –  de acompañarnos por el otro y como venganza primitiva suprimirlo por default.  El paisaje es sonido y silba como karaoke oriental y autotune. Lo minimalista de la construcción coreográfica, lo antipático de la danza y su movimiento, el espacio constipado, simétrico, cinematográfico, el close up del que mira, el diálogo  de los que conversan…

Dirección: Guillermo Aguilar*

Performers: Carla Segovia + Alberto Hernández

Música original / Sonorización en vivo: Aristóteles Benítez**

Iluminación: Jésica Elizondo***

Artista plástico: Hermes Pichardo

Espacio escénico: MALA ONDA

Vestuario: MALA ONDA

• Lilith  de Andrea Scheel // 15 min.

Gestando un cuerpo, una cuerpa, hecha de trozos y pedazos, y como saliendo del liquido uterino, va formandose un ser producto de su entorno. Fragil, sin forma definida, toma como unica referencia su propio sonido, su unica fuente para saber que existe.

Desenrosca, desliza, tropieza, respira y pulsa…

Se ha creado un universo , una realidad sonora, y ya este ser ha tomado forma. Una forma mutante, un signo mas de lo femenino, Lilith, un ser «maquina» , pues es algo funcional, que cobra sentido por las relaciones que tiene. Existe en relacion a la mirada externa, a la historia, a su entorno, a lo percibido como normal. La existencia de Lilith ahora es valida por el fin que tiene, vestida de rosa y con purpurina, ahora ella es una diosa, o un monstruo.

Concepto y ejecutante: Andrea Scheel

Dirección: Talia Hinojosa

Asistente de materiales y vestuario: Luciana Matilda

• De tripas corazón de Fabiola Ortega Díaz de León // 15 min.

Un segundo cerebro. Uno que de pronto, caemos en cuenta, tiene casi la misma cantidad de neuronas que el cerebro localizado en el cráneo y que es, además, responsable de buena parte de nuestras emociones: la felicidad, la miseria, el enamoramiento, la ira, el asco. El cerebro intestinal que pasa de ser “una simple cañería” y empieza a tomar relevancia en áreas relacionadas con la salud emocional, mental y física de los cuerpos que somos. Además de éste, otro espacio pensante dentro de nuestro cuerpo: un tercer cerebro localizado en nuestro corazón, donde hay también neuronas que indican que el corazón siente, piensa, decide. Nos da, literalmente, “corazonadas”.

A partir de la escucha y observación de los tres cerebros estamos construyendo este diálogo entre cuerpos, andando por los recovecos del otro, creando acuerdos, negociaciones, aprendiendo a sentir. Es una metáfora sobre la vida y las relaciones interpersonales, las conexiones que vamos desarrollando con los otros y las emociones que cocinamos en el cuerpo. Nos encontramos en la búsqueda del equilibrio entre los tres cerebros para interpretar y reinterpretar las ausencias, la transitoriedad de la vida, los seres, los encuentros y el amor. Si esuchas a tus tripas y a tu corazón, ¿en que parte de tu cuerpo habita el amor?

Intérpretes: Luis Villegas Esparza, Sofía Zamudio Flores, Ezequiel Romero Flores, César Alberto Blas García, Francisco Sotelo Vargas y Fabiola Ortega Díaz de León.

Dirección escénica: Fabiola Ortega Díaz de León

* Becaria/o Jóvenes Creadores FONCA 2018-2019

**Becario PECDA Ciudad de México 2018-2019

***Sistema Nacional de Creadores de Arte 2018-2020